El terrorismo no detiene las protestas en Marruecos

Miles de marroquíes han salido este domingo a la calle en Marrakech para seguir exigiendo avances democráticos

EDUARDO MARÍN (Corresponsal en Marruecos)   08-05-2011
Pasadas las once de la mañana hora local, (una hora más en Península y Baleares) comenzaban a escucharse las proclamas de los presentes, que seguían pidiendo, como en anteriores ocasiones, avances democráticos, el fin de la corrupción y verdaderas reformas que instauren « libertad e igualdad » en el país, asegura Oussama El Khlifi, uno de los organizadores del Movimiento del 20 de febrero, que lleva más tres meses liderando las protestas en Marruecos.
Entre los carteles también se podía leer un claro rechazo al terrorismo, en referencia al atentado que el pasado 28 de abril sacudió el Café Argana, en la plaza Jamaa El Fna, en Marrakech, y que dejó 17 muertos y 21 heridos. «El terrorismo no nos va a echar para atrás», afirma El Khlifi, quien asegura además que «no nos podemos fiar de la investigación del atentado porque no tenemos una justicia independiente».
Una idea muy presente entre los manifestantes, que incluso llegaban a entonar cánticos que acusaban al «Majzén» (estructura de poder alrededor de Palacio) de «estar detrás del atentado para frenar las protestas».
«Queremos democracia y libertad, un cambio radical», sostiene Mohamed, uno de los manifestantes, quien quiere subrayar además que los responsables del atentado «no aman a Marruecos», ya que «el islam no es una religión violenta, sino que defiende la paz de todos los pueblos».
La marcha, que ha recorrido diversos barrios de la denominada «ciudad ocre» ha finalizado en la plaza Jamaa El Fna, donde los manifestantes han entrado a grito de «rebélate para acabar con el régimen».
Una vez en la plaza, las miles de personas que componían la marcha se han quedado en la entrada, para no entorpecer el desarrollo habitual de este emplazamiento turístico. Todos los presentes fijaban su mirada en el derruido Café Argana mientras apuraban sus últimas proclamas a favor de la democracia, que se han apagado minutos después, pero tan sólo, hasta la próxima convocatoria, que está prevista en todo el país para el 22 de mayo.

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