«Queremos abrir nuestras puertas y que nos conozcan» (Fouad Sibari)

Fuente: La Verdad (20/12/2007)
Fouad Sibari vive en Lorca, está casado, y tiene hijos. Aquí trabaja en una entidad bancaria. Es uno de los organizadores del acto que se llevó ayer a cabo en el recinto ferial de Santa Quiteria. Su mayor preocupación es dar a conocer la religión musulmana de la que, asegura, tiene muchas similitudes con la cristiana. Le molesta que muchos vean a los musulmanes como meros terroristas.
- ¿Qué celebran estos días?
- Es la Fiesta del Adha, que significa cordero. Empieza a los 70 días después de iniciarse el Ramadán.
- ¿Cuánto dura?
- Son tres días. El primero, toda la comunidad islámica se reune en un gran lugar para celebrarlo de forma conjunta. Luego, cada familia lo celebra de forma particular con el rito del sacrificio del cordero.
- Se reza, se abrazan y se besan.
- Para nosotros son días de perdón, en los que no existen el rencor; por eso, después de los rezos la gente se abraza y se besa. Conmemoramos que el musulmán ha vencido a Satán.
- ¿Cómo se lleva a cabo el rito del sacrificio del cordero?
- Los que pueden, lo hacen en su hogar; los que no, lo compran en una carnicería donde lo hayan sacrificado por nuestro rito. Se come en familia un tercio, mientras que el resto, dos tercios se entrega a los pobres o a alguna institución benéfica.
- Es un rito poco conocido entre la comunidad de la Región, donde la mayoría de la población es cristiana.
- Sí, y eso es precisamente lo que queremos conseguir, que el Islam se conozca cada día más. Queremos abrir nuestras puertas para que exista diálogo, interculturalidad, entre nosotros, y los autóctonos. No todos los musulmanes son terroristas, no se puede generalizar, como no todos los españoles cristianos son de ETA.
El imán de Lorca, Mohamed Abdiadi, habló largo y tendido durante más de media hora a todos los congregados, hombres, arrodillados frente a él, sobre alfombras y descalzos; y mujeres, apartadas, a unos metros, y en compañía de pequeños de corta edad. Al término del ceremonial se besaban y abrazaban, ya que se festejaba que la religión musulmana había vencido al mal, a Satán.
Todo el ceremonial fue explicado a La Verdad por Fouad Sibari, musulmán que reside en Lorca y que fue uno de los encargados de la organización. «Hoy [por ayer] es la gran fiesta del Islam. Nos juntamos todos en un mismo lugar para festejar el final del Ramadán. No hay rencores, ni odios».
La celebración en el Recinto Ferial de Santa Quiteria se debe, según explicó, a que se trata de un lugar lo suficientemente grande como para albergar a los cientos de musulmanes que se dieron cita. En un pabellón aledaño se encontraban los niños más pequeños, atendidos por monitores que les entretuvieron con diferentes juegos y actividades.
Sibari, también habló de la similitud de la Fiesta del cordero islámica con un pasaje de la Biblia cristiana. «Es parecida a la prueba que Dios le hizo a Abraham con el cordero y su hijo». Ayer, hoy y mañana, en las viviendas de los musulmanes se sacrificarán corderos. «Cada familia lo hará. Los que puedan sacrificarlo bajo nuestro rito lo harán en sus casas, y los que no, acudirán a las carnicerías donde se hace como manda la tradición», añadió.
Respecto al número de personas que habían acudido, señaló que «no son demasiadas, ya que al tratarse de un día de trabajo, muchos no han podido venir». Tras el rezo, compartieron un desayuno junto a autoridades como el alcalde, Francisco Jódar, y parte de la corporación municipal, además del capitán de la Guardia Civil de Lorca y jefes de la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía. Tomaron té y pastas a base de almendra, miel y dátiles.

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